LITERATURA TANGO

Rafael Flores Montenegro

Rafael Flores Montenegro

Tango: Poesía a pie de calle
Empezamos con el tango “nel mezzo del cammin di nostra vita”, allá por la década de los ochenta. Publicaciones, libros, radio, espectáculos, discos, milongas de todos los estilos -desde las realizadas en Salas Alternativas hasta las que tuvieron lugar en el Hotel Ritz-, documentales en televisión, conferencias… Desde entonces sentimos que “el tango estaba haciendo sonar su regreso”.
Uno continúa, tira hacia adelante, aunque el tiempo lo despeine, le marque arrugas y otras grises hazañas. Sigue insistiendo en sus entusiasmos, mientras a su vez el Tango ya camina solo, de la mano, los pies y el corazón de jóvenes que continuarán multiplicando su caudal.

Es inevitable considerar la existencia el Tango para entender el siglo XX. Lo dicen las películas y lo expone el modo de bailar abrazado -hallazgo tanguero fundamental- que inclusive se ha metido en otros géneros contemporáneos. Es inevitable para hablar de Madrid, Barcelona, Milano, Nueva York… y no sólo Buenos Aires y Montevideo. Así su vida, gozando de mejor salud día a día.

Sabe el Tango de ejes centrales de los tiempos modernos: migraciones, mezclas culturales, globalizaciones, modas, de inventos felices como el disco y la fotografía. Sabe de nuestro impulso a vivir por encima de todo condicionamiento, de nuestra caducidad, de los anhelos por elevarnos desde el barro del que estamos hechos.
Quizá, sin extremar las consideraciones, encarna la auténtica poesía contemporánea escrita a pie de calle.